Expertos vs Vendedores de humo
Hoy he leído un post de mi amigo Rubén: Cómo aprender cualquier cosa… rápido. Es curioso como cualquier persona con acceso a Internet se puede convertir en un experto en cualquier materia, como puede ser el caso de Julius Yego, campeón del mundo de lanzamiento de javalina que aprendió y mejoró su técnica de lanzamiento gracias a vídeos de Youtube. Por otra parte, en Twitter hay gente que con solo un tweet ya puede hablar de cualquier cosa creyéndose experto.
Definición de experto: El que sabe algo sobre algo que tú no sabes...
— Jorge Casas (@jorgecasas) September 12, 2013
Dándole vueltas al asunto: ¿Cuánto tiempo se tarda en ser experto en una materia?. Se suele decir que para convertirse en piloto experto necesitas 10000 horas de vuelo. En el post de Rubén (que surge tras ver una charla de Josh Kaufman), Josh asegura que con 20 horas puedes aprender lo suficiente como para saber por dónde te da el aire. Yo no me atrevería a pilotar un avión con solo 20 horas, pero sí que es verdad que en 20 horas (dedicadas y centradas en dicho aprendizaje) sabría por dónde seguir aprendiendo, por dónde buscar información o qué otros temas me interesaría aprender (es decir, sabría conceptos básicos: Un avión es eso que tiene alas… y de ahí ya podría buscar más información sobre navegación, motores a reacción o manuales de vuelo, según los intereses de cada uno…)
Sabe más el diablo por viejo que por diablo #refraneropopular #mehagoviejo #cuidado
— Jorge Casas (@jorgecasas) August 31, 2015
Esas 20 horas iniciales (y si pueden ser guiadas mejor) permiten tener una mínima base. Es el mismo ejemplo que suelo dar a la gente que quiere empezar a correr: Si eres capaz de correr un mes (que probablemente sean menos de las 20 horas netas indicadas), no serás campeón olímpico, pero notarás que te sientes mejor, tienes más resistencia, y no mueres al ir a tu casa y subir por las escaleras en lugar de usando el ascensor. Es una base, la cual también se puede perder si con el paso del tiempo no practicas.
Pero de esas 20 horas a las 10000 quedan 9980 horas de adquirir conocimiento y habilidades. Me hace gracia cuando leo en currículums que alguien es experto en cualquier tema con 1 ó 2 años de experiencia. Yo llevo desarrollando software y aplicaciones durante más de 15 años y me doy cuenta de todo lo que me falta por aprender… Y cada día más, puesto que hay nuevos caminos, corrientes, metodologías, lenguajes, sistemas… La tecnología avanza muy deprisa y el tiempo de aprendizaje es limitado.
Gente que conoces en persona y ves su perfil de Linkedin y les tienes que decir que añadan "Vendedor de humo" entre sus habilidades
— Jorge Casas (@jorgecasas) August 18, 2014
Conforme adquieres nuevas habilidades, conocimientos y herramientas, se abre un nuevo mundo de posibilidades, un nuevo conjunto de conocimientos por adquirir: La senda del conocimiento es misteriosa, pero un pequeño empujón (de 20 horas) puede hacer que cualquiera pueda comenzar a andar. Luego ya todo va rodado.