• Hype

    Definición de “Hype”: Hipérbole es un tropo que consiste en exagerar, aumentando o disminuyendo la verdad de lo hablado, de tal forma que el que reciba el mensaje le otorgue más importancia a la acción en sí y no tanto a la cualidad de dicha acción.

    Hype

    Esta es, para mí, una de las palabras de moda de los últimos años. Siempre ha habido gente a la que le gustaba exagerar todo lo que hacía, todo lo que tenía, todo lo que sabía, todo lo que vendía… pero ahora es más llamativo que nunca que todo el mundo busca llamar la atención. Así, en unos meses han ido surgiendo términos para definir conceptos que, si bien ya existían previamente y mucha gente ya los utilizaba desde hace tiempo, parece como si no se hubieran utilizado nunca y ahora fueran el nuevo “El Dorado” que salvará la economía mundial.

    Por ejemplo:

    • Big Data: Término utilizado para hacer creer a la gente que usas muchos datos y que eres capaz de procesarlos (aunque luego los tengas todos contenidos en una hoja de cálculo Excel). Parece como si hace unos pocos años antes de que apareciera el término nadie almacenara millones de datos.
    • AI - Inteligencia Artificial: “Nuestro sistema utiliza inteligencia artificial para devolver la respuesta correspondiente”. Muy bien, seguro que no dejan de ser unos cuantos ifs en el código.
    • Machine Learning: “Nuestro sistema utiliza Machine Learning para hacer X”. Un método que devuelva una regresión lineal ya se podría considerar Machine Learning…
    • Y otros muchos términos como Blockchain, Containers, DevOps, Cloud… (Nota: todos estos términos se escriben en inglés para que sean más cool)

    Estos términos, como se puede deducir, hacen referencia a tecnologías o conceptos que se pueden aplicar al desarrollo de aplicaciones y sistemas, y que gracias a ellos las grandes empresas pueden inflar sus respectivas facturas: “¡Hey!, el sistema no sirve para nada pero utilizamos Blockchain con Big Data para hacer el procesado mediante Machine Learning para que nuestros DevOps realicen el despliegue mediante el uso de contenedores al cloud en el mejor momento del día… Y esto hay que pagarlo de alguna manera…“

    En el momento en el que surge un nuevo término surge a su vez una manada de gente / empresas / vendedores de humo que tratarán de hacer negocio con dicho término. Intentarán que lo apliques a cualquier cosa que hagas o desarrolles (e intentarán cobrarte por ello). Montarán webinarios, seminarios, charlas TEDx, cursos online… lo que haga falta, para que el término gane popularidad y la gente se crea que es necesario implementar dicho término en sus productos y procesos (aunque no sea necesario ni lo más mínimo en la mayoría de las ocasiones). Es en ese momento cuando el hype aparece en todo su esplendor…

    Y esto da un poco de pena: Gente que no sabe de qué está hablando realmente. Mi consejo de hoy: No hagáis caso de los vendedores de humo, aprended lo máximo posible sobre qué implica cada término, y pensad antes de actuar. No siempre hay que aplicar todo lo que aprendemos, en casi todas las ocasiones no lo necesitaremos e incluso será mejor no aplicarlo, porque muchas veces lo más sencillo nos llevará al mismo objetivo con mucho menos sufrimiento.

  • Gráficas de tarta

    En los sistemas que desarrollamos en ITERNOVA tenemos varias cosas claras: Nunca hay que poner música de fondo en un sistema web y nunca hay que usar una gráfica de tipo tarta.

    La primera de las cosas tiene una razón muy clara de ser: Ya no estamos en los años 90. La música suele ser molesta, generalmente no es la que el usuario quiere escuchar o le gusta, hace que las diferentes pantallas tarden más en cargar, se suele superponer a la que el usuario pueda estar escuchando, y generalmente no se sabe de dónde está sonando. Si la página está en varias pestañas del navegador, es muy difícil que no se superpongan entre sí.

    Con respecto a las gráficas de tarta, hay que evitarlas. Alguna vez no queda más remedio porque el cliente así te lo exige (y no ha leído este post). Solo hay una razón para evitarlas, y es que no permiten comparar visualmente la información y datos contenidos en este tipo de gráficas, por lo que no son útiles. Con una gráfica de barras o de líneas se consigue poder comparar al instante si un valor es mayor o menor que otro… con las gráficas de tarta no lo puedes saber con exactitud.

    Sin embargo, hay varias excepciones para las cuales es el mejor tipo de gráfica, y son las siguientes:

    Gráfico de tartas Gráfico de tartas Gráfico de tartas Gráfico de tartas Gráfico de tartas

    Últimamente se está poniendo de moda hacer infografías y sacar datos en todo tipo de gráficas, por lo que hay que tener en cuenta otro parámetro a la hora de diseñar las gráficas: Los colores de las leyendas. Los colores utilizados en las series de datos deben cumplir algunos requisitos que vamos a enumerar a continuación.

    No utilizar colores similares para series de datos conceptualmente diferentes. Por ejemplo, si estamos generando una gráfica con dos series (número de peras y número de manzanas), deberemos escoger dos colores opuestos visualmente. Es decir, no conviene usar un rojo anaranjado para las peras y un naranja rojizo para las manzanas, mejor utilizar un verde para las peras y un rojo para las manzanas. Por tanto, habrá que escoger una paleta lo más amplia posible de colores lo más diferentes posibles, utilizando colores parecidos solo cuando tengamos tantas series que no nos quede más remedio que repetir algún color, o bien cuando queramos crear un mapa de calor o gradientes.

    Mapas de calor, o gradientes de valor: Estos tipos de gráficas o infografías suelen ser utilizadas para medir un porcentaje de uso, actividad o carga en diferentes elementos. En estos casos es importante elegir correctamente la escala de color, ya que estamos programados para asociar colores a situaciones en concreto. Por ejemplo:

    • Verde: Todo marcha bien
    • Naranja: Algo va regular
    • Rojo: Algo falla
    • Negro: No funciona nada

    Si utilizamos una escala diferente, a primera vista el usuario puede llegar a pensar que todo va bien, cuando en realidad no es así… Aunque quizá sea lo que se está buscando (que el usuario piense que todo funciona correctamente aunque haya cosas que no sean tan bonitas como las pintan). Por ejemplo, una escala del siguiente tipo:

    • Azul: Todo marcha bien
    • Morado: Algo va regular
    • Verde: Algo falla
    • Naranja: No funciona nada
    • Rojo: No funciona ni el panel de control…

    Este caso sería el equivalente a mostrar gráficas en el que el eje Y no estuviera en el 0, sino en un valor arbitrario…

    Colores válidos para daltónicos: En algunos sistemas, es probable que además de utilizar colores se deban utilizar símbolos, ya que algunos colores de la paleta pueden ser confundidos por usuarios con daltonismo. Si es posible, habría que escoger colores que no se confundieran entre sí. Existen webs y aplicaciones para simular daltonismo en interfaces de usuario, imágenes, etcétera…

    Y por último, lo más importante: Que los datos sirvan para mostrar algo.

    UPDATE 2017-04-21 23:30 Como indica @MCanalesMayo no está de más tener en cuenta en las representaciones gráficas las leyes de agrupamientos de Gestalt, leyes que no conocía pero que tienen mucho sentido para mostrar los datos de forma atractiva: Crear grupos por proximidad de datos, semejanza de formas / colores, creación de formas reconocibles por parte de los humanos…

  • 37 pequeñas historias

    Durante años de mi juventud tuve un pequeño blog lleno de posts sobre cualquier tema de juventud e historias curiosas en general. No era un blog técnico, ni en el que se detallaban proyectos personales… muchas veces eran comentarios sobre noticias de la prensa o cosas que me iban sucediendo en el día a día, contadas de una forma distendida. Cuando ya dejé de actualizarlo por el año 2007, antes de que muriera por completo hice una recopilación de las mejores historias (o las únicas algo reseñables), creando un pequeño libro autoeditado en Internet para aprender sobre temas de publicación / autoedición.

    37 pequeñas historias

    Desde el 2008 he vendido varias copias de 37 pequeñas historias (2 en formato papel, 1 en formato ebook), lo cual, además de ser un número de ventas patético, hace que el libro no se convertirá en un best-seller. Si tengo suerte, quizá se convierta de aquí a miles de años en un libro de culto.

    Como dice el slogan, a la cultura por la lectura, así que aquí os dejo enlaces para descargar en formato PDF el libro de manera gratuita o comprarlo en formato papel para regalarlo a vuestros seres más queridos.